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Se llama ciátiva al conjunto de síntomas caracterizados por dolores propagados a lo largo del trayecto del nervio ciático (abarca el muslo y la pierna).

Las causas de ciática son muy variadas: hernia discal, acción tóxica del alcohol y el tabaco, diabetes, sífilis, mal de Pott. tumores óseos vertebrales, afecciones en la pelvis o en la próstata, caídas, golpes, etc.

En ocasiones una ciática aparece después de haber permanecido al frío o expuesto a la humedad,

El síntoma por excelencia de esta enfermedad es el dolor. Éste es de carácter agudo e intenso. Presenta crisis de agudización cada vez que el enfermo mueva el tronco o las extremidades, aunque sea simplemente por un ataque de tos. por un estornudo, etc. Otro síntoma que puede presentar es la rigidez de la columna vertebral

El diagnóstico se basará en las causas que produzcan esta afección. Caso de que además del dolor aparezca fiebre, adelgazamiento o astenia, podria corresponder a la manifestación del larnado “mal de Pott”. Si a través de la historia clínica del paciente se aprecia que la ciática ha estado precedida por un ataque de lumbago, seguramente el enfermo realzó un esfuerzo violento que le causó el dolor.

La ciática es. en general, una enfermedad de larga duración. El hombre suele ser víctima de esta afección más a menudo que la mujer. En el niño no aparece casi nunca.

El tratamiento debe ser anteado en seguida que se detecte, ya que un tratamiento precoz es casi garantía de curación. Por el contrario, si el remedio tarda en aplicarse la curación es más difícil. Un tratamiento bien hecho y completo de medicina natural constituye el método más eficaz para su curación.

Cuando la ciática es consecuencia de enfermedades como el reumatismo o la gota, se acudirá al tratamiento especifico dado para estos casos.

Hay que distinguir dos fases en el tratamiento. En la crisis aguda de dolor, el enfermo debe hacer reposo en cama. Si es posible en cama dura. Se aplicará calor local evitando frío y humedad Es conveniente que el paciente se acueste sobre el lado sano. Puede aptearse sobre taparte enferma cataplasmas de flores de heno.

En las fases en que haya desaparecido ya el dolor agudo se empezará a practicar una gimnasia adecuada (flexión abdominal) y masajes. Si se trata de una persona obesa será muy conveniente que pierda peso. Se acompaña este tratamiento con baños de sol y baños parciales de vapor.

Son además muy eficaces los baños de tronco de larga duración, de 20-45 minutos, en los que se va aumentando d calor añadiendo agua caliente a medida que la anterior se enfría.

Mientras se practica este baño, la persona tomará zumo de limón mezclado con agua caliente en la proporción de un litro de agua para dos limones: puede edulcorarse con miel. Luego se secará bien al enfermo y acostará dándole mucho calor. Se le administrará otro vaso de zumo de limón y agua caliente.

Infusiones medicinales

Durante este período de curación ek paciente puede tomar tisanas de las siguientes plantas medicinales:

Infusión para la ciática con corazoncillo: una cucharada de flores de corazoncillo por cada taza de infusión. Se tomarán dos o tres tazas al día

Infusión para la ciática con diente de león: se hace un cocimiento de una cucharada sopera de la raíz pulverizada por cada taza. Se tomarán tres tazas diarias. El diente de león también puede tomarse crudo en ensalada, con lo que se aprovechará el gran aporte de vitaminas y sales minerales que tiene esta planta y. a la vez. tomar el jugo.

Infusión para la ciática con ranúnculo: El ranúnculo es una planta con la que pueden hacerse cataplasmas para poner sobre la parte enferma. Debe usarse fresco (de junio a agosto). Aplastar hojas y flores hasta conseguir una pasta. Esta pasta se aplicará hasta que forme una gruesa vesícula.

Recomendaciones

El mejor tratamiento alternativo es la acupuntura pues, combinada con la moxibustión, disminuye el dolor y estimula el flujo sanguíneo y energético en el área afectada, en pocas sesiones, lo cual favorece una curación mucho más rápida. Se tratan sobre todo puntos de los canales de la vejiga y de la vesícula biliar.

La reflexología se concentra en estimular los puntos de los pies y las manos que corresponden a la parte inferior de la espalda, calmando así el dolor y la inflamación.

La osteopatía también es útil en el tratamiento de la ciática. Un buen osteópata está en condiciones de identificar la causa de la afección después de una exploración detallada. El tratamiento consiste en un masaje suave de los tejidos y quizá un poco de manipulación. Además, se incorporan al tratamiento consejos y ejercicios sobre la postura.

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