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La hierba limón, llamada también, caña de limón, citronela o limoncillo, se parece a un arbusto gigante y es una planta tropical aromática con hojas largas que crecen hasta 1,5 metros.

Se le atribuyen gran cantidad de efectos terapéuticos y se ha usado durante siglos en Sudamérica e India.

Además de su utilización en medicina popular, la caña de limón es un ingrediente importante de la cocina tailandesa y de los platos que desprenden un aroma fuerte y picante del estilo de Asia.

Existen varias especies de caña de limón o hierba limón; la variedad que se suele recomendar por sus propiedades medicinales es Cymbopogon citratus. La hierba limón es originaria del sudeste de Asia y también se puede encontrar en India, Sudamérica, África, Australia y Norteamérica.

No debe confundirse con la melisa, que es una planta completamente diferente.

Propiedades curativas

Aunque sin saberlo, muchas personas ya han probado la hierba limón de una forma u otra, ya que uno de sus componentes químicos es un ingrediente de diversos alimentos y bebidas (como el alcohol). Se puede encontrar en caramelos, alimentos cocidos al horno, productos cárnicos y en ciertas grasas y aceites.

Al igual que otros aceites esenciales, la hierba limón también se utiliza como potenciador de fragancias en muchos perfumes, jabones y detergentes.

La hierba limón tiene una amplia variedad de efectos terapéuticos. Esta planta no se ha estudiado de forma extensa en personas, por lo que su efectividad se basa principalmente en estudios en animales de laboratorio y en la experiencia de siglos como remedio popular.

En el Amazonas, la caña de limón es muy utilizada como infusión sedante.

Administrada por vía oral, se ha recomendado para dolores de estómago, diarrea, meteorismo, gastritis, espasmos intestinales, vómitos, fiebre, gripe y dolores de cabeza y de otro tipo. La planta (o su aceite esencial) se aplica externamente para ayudar a tratar el acné, el pie de atleta, la lumbalgia, la ciática, los esguinces, la tendinitis, la neuralgia y el reumatismo.

Para tratar los trastornos circulatorios, se recomiendan realizar friegas con algunas gotas de aceite de caña de limón sobre la piel de la zona afectada, ya que se cree que actúa mejorando el flujo sanguíneo. Al igual que otros aceites esenciales, el de caña de limón se utiliza también en el tratamiento mediante aromaterapia.

La relación de la caña de limón con el colesterol se ha estudiado en varios ensayos, y se ha observado que personas que tomaban cápsulas de aceite de caña de limón diariamente presentaban en algunos casos una reducción significativa de las grasas en la sangre. Cuando estas personas dejaban de tomar la planta, sus niveles de colesterol volvían a los valores anteriores.

Como antiséptico y astringente, el aceite esencial de caña de limón también lo utilizan algunas personas para limpiar la piel grasa y ayudar a cerrar los poros. Algunos fitoterapeutas recomiendan mezclar unas gotas de caña de limón con una parte normal de champú suave para combatir el pelo graso. El aceite esencial de caña de limón también se utiliza como desodorante para controlar la transpiración.

La caña tiene una gran reputación como repelente de insectos. Es un ingrediente importante en varios productos contra las chinches. Algunos autores recomiendan frotar la planta triturada sobre las áreas de piel expuestas para evitar las picaduras de insectos cuando se realizan actividades al aire libre.

Infusiones medicinales

Infusión con hierba limón para los vómitos Hervir en una taza de agua por 5 minutos 1 cucharada de limoncillo o hierba limón.  Dejar refrescar sólo un poco y tomar aún caliente a sorbos.

Infusión con hierba limón para la gastritis: Hervir 1 cucharada de hierba limón y 1/2 de raíz de regaliz picado en una taza de agua por 5 minutos.  Tapar y dejar refrescar.  Colar y tomar 1 taza cuando se sienta el malestar

Infusion con hierba limón para el dolor de estómago: Verte 1 cuchada de hierba limón y una pizca de jengibre en polvo en una taza de agua que esté hirviendo.  Tapar y dejar refrescar sólo un poco.  Tomar, a sorbos, cuando se presente el malestar.

Infusión con hierba limón para adelgazar: Mezclar 1 cucharada de hierba limón y 1/2 cucharadita de pimienta negra y hervir en una taza de agua por 5 minutos.  Cubrir y dejar refrescar.  Tomar 3 veces al día.

Remedio con con hierba limón para la ciática, la lumbalgia, los esguinces, la tendinitis y el reumatismo:  Realizar friegas con diez gotas de aceite esencial sobre la piel de las áreas afectadas.

Precauciones

Los niños, las mujeres embarazadas o que dan el pecho o las personas con enfermedades del hígado o del riñon, no deben tomar el aceite esencial por vía interna.

En casos raros, el aceite esencial de caña de limón puede ocasionar reacciones alérgicas cuando se aplica en la piel.

Para disminuir la irritación cutánea, hay que diluir el aceite en un aceite normal como el de cártamo o de girasol antes de proseguir su aplicación. Al igual que el resto de aceites esenciales, deben utilizarse pequeñas cantidades y sólo durante un tiempo limitado.

Hay que evitar aplicar la caña de limón (tanto la planta como el aceite) en los ojos.

Cuando se toma en las dosis recomendadas, la caña de limón no se asocia a ningún efecto secundario importante.

No se conoce que la caña de limón interactúe de forma perjudicial con ningún fármaco o suplemento dietético.

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